El Taller de Musics presenta en El Dorado Sociedad Flamenca Barcelonesa el proyecto Aurora, elaborado por jóvenes talentos formados en sus aulas.
Recital a cargo de Pere Martínez, cante, Max Villavecchia, piano, Javi Garrabella, bajo, Joan Carles Marí, batería y José Manuel Álvarez, baile.
Jueves, 30 de noviembre de 2017, 20 h. Entrada 10 €, socios gratis.
Sala Sandaru (Buenaventura Muñoz, 21. 08018 BARCELONA).
Enric Palomar que fue el director de esta aventura musical que más tarde se convirtió en disco, dice así de la obra:
Aurora es, desde mi punto de vista, el profundo e indestructible ADN del Taller de Músics, la casa donde la transversalidad no es un acuerdo sino una naturaleza: diferentes ángulos de la misma realidad deshilachan los tópicos y tejen no la suma de los ángulos, sino “otro” ángulo.
Aurora, por utilizar términos más musicológicos, se basa en tres cimientos que fluyen con naturalidad entre sí: un compromiso con la creación contemporánea, de amplio recorrido tanto en lo armónico como en el diseño formal de los temas; el lenguaje del jazz como acuerdo tácito de herramienta funcional y de código lingüístico; y por último, el mundo del cante flamenco como vía de exploración para llegar a territorios novedosos.
Aurora gira en torno a la figura de Manuel de Falla, alrededor del cual se articulan tres vías conceptuales: la obra del propio compositor gaditano fiel al material folklórico ibérico y no solo flamenco; el binomio Falla-García Lorca, representado por las canciones populares recopiladas y redimensionadas por el “poeta-músico”; y por último, la relación Falla-Pedrell.
Del propio Manuel de Falla aparecen dos vectores interesantes: el Falla atento al gitanismo (“Canción del Fuego Fatuo”) y el Falla atento a todas aquellas posibilidades abiertas de tipo ibérico: “Asturiana” y el “Polo”, de las Siete Canciones Populares españolas. Del Cancionero de Pedrell aparecen, vigorosos, algunos materiales folklóricos que Aurora sabiamente reelabora:
“Otra” −referida a una canción popular asturiana−, “Copla carcelera” y una de las Cantigas de Alfonso X el Sabio. Sobre esta última, decir que el compositor granadino la usa en su obra El Gran Teatro del Mundo, sobre el auto sacramental de Calderón de la Barca. De la relación Falla-Lorca y su compromiso estético compartido con respecto a la universalización del flamenco y del cante jondo como punto de partida, Aurora nos transporta a mutaciones llenísimas de contenido en el “Anda jaleo” y el “Zorongo”, posiblemente dos de las más representativas. El tema “Bajo la lluvia ajena” forma parte de la suite Nunca los daré por muertos (Homenaje a Juan Gelman). Está basada en la temática del exilio (que afectó también a Manuel de Falla) y toma prestados versos de Ovidio y de Dante Alighieri, en un intento de explicar la universalidad temporal y estética del concepto de exilio.
El disco se cierra con “La luna asoma”, composición de Max Villavecchia que, desde parámetros iniciales de construcción minimalista, se ensancha hasta complejas relaciones armónicas. Con este tema, Aurora se designa a sí mismo como plataforma donde resolver inquietudes estéticas y compositivas de sus intérpretes, cosa que dota al grupo de un grado de originalidad más acusado.